El pan de jengibre se remonta a los antiguos griegos y egipcios que lo utilizaban con fines ceremoniales. La receta con el paso de los años ha sufrido muchas variaciones. ¡A mejor! para nuestro deleite y disfrute.La Casita de Jengibre se hizo muy popular en Alemania después de que los hermanos Grimm publicaran su famoso cuento “Hansel y Gretel” en el siglo XIX. ¿Quién no ha soñado con poder devorar una casita de galleta, caramelos y chocolate?
Casita de Jengibre
Ingredientes
Para la masa
250 g Mantequilla a temperatura ambiente
200 g de azucar moreno
2 huevos L
100 g de melaza o miel
3 cucharadas de canela molida
3 cucharadas de jengibre molido
1/2 cucharadita de clavo molido
½ cucharadita de pimienta molida (opcional)
800 g de harina
leche (si es necesaria)
No recomiendo hacer esta receta a mano, es imprescindible la ayuda de una batidora eléctrica.
Elaboración
En un bol bate a velocidad baja la mantequilla troceada hasta que tenga una textura suave. Incorpora el azúcar dejando que se integre bien en la mantequilla. Sube la velocidad y deja unos minutos hasta que tenga una textura esponjosa.
Baja la velocidad y añade los huevos ligeramente batidos y también la melaza y las especies. Sigue batiendo un par de minutos más.
Cambia las varillas por la pala plana. Con la harina tamizada, ves echando a cucharadas de a poco dejando que se integre. Cuando lleves ¾ de la harina la masa empezará a desmigarse, en este momento añade la leche, una cucharada cada vez, y sigue mezclando hasta que la masa vuelva a ligar.
Añade la harina restante hasta que veas que la masa se despega sola de las paredes del bol y se forma una bola.
Estira la masa con un rodillo entre hojas de papel vegetal a 6 mm de grosor. Guarda en la nevera durante al menos 6 horas.
Corta las galletas con un «Kit cortadores casita de Jengibre» y colócalas en una bandeja de hornear con 2 cm de separación. Recuerda poner en cada bandeja galletas del mismo tamaño para que se horneen por igual.
Aquí te dejo una recomendación por si no tienes set de cortadores Además de las partes de la casa tiene un montón de cortadores perfectos para galletas de navidad!
Vuelve a guardar en la nevera entre 30 minutos y 1 hora para que no pierdan la forma al hornearse.
Con los recortes que sobran, únelos en una bola y estira nuevamente con el mismo procedimiento anterior.
Enfría en la nevera un mínimo de 1 hora, estos recortes los puedes utilizar hasta 3 veces. Después la superficie de la galleta queda muy rugosa y no va bien para decorar, pero sigue estando buenisima!
Precalienta el horno a 180º e introduce la bandeja de hornear a altura media.
El tiempo de cocción varía en función del tamaño de la galleta y del horno que uses, por lo tanto una galleta de 10cm (unos 12 minutos) no se hornea el mismo tiempo que una de 20cm (unos 22 minutos). Lo ideal es que las saques cuando tengan toda la superficie dorada.
Cuando las saques del horno, déjalas enfriar 5 minutos y luego las retiras con una espátula con mucho cuidado.
Déjalas enfriar encima de una rejilla. En este momento verás que las galletas están un poco blandas, pero al enfriarse se endurecen.
Conservación
Una vez frías y si no vas a decorarlas ese día, guárdalas en un taper hermético entre hojas de papel de hornear. Las galletas tienen una duración de 2 meses a partir de su elaboración.
Puedes congelarlas en el mismo taper hermético durante 3 meses, cuando vayas a utilizarlas colócalas en una rejilla y deja a temperatura ambiente durante al menos 2 horas antes de decorarlas.
Las galletas ya decoradas nunca se congelan.
Recomendaciones:
Puedes prescindir de la pimienta si vas a preparar las galletas para los más peques de la casa.
Utiliza bandejas de horno de metal claro, ya que las negras reparten muy mal el calor y siempre te quedaran algunas galletas quemadas y otras un poco crudas.
¡No tires los recortes que te sobren después del tercer estirado! Córtalas con la forma que más te guste. La superficie quedará rugosa, pero están igual de buenas para comer en el desayuno.
Esta masa es perfecta para hacer muñecos o formas para colgar en el árbol. Antes de hornearlos, haz un agujerito en la masa con ayuda de una cañita, para que luego puedas pasar una cinta o cordel.
Glasa real
Ingredientes:
45 g de albúmina
950 g azúcar glass (icing sugar)
170 g agua
1 cucharada de glucosa
½ cucharadita de crémor tártaro
Esencia transparente
6 gotas de ácido acético (vinagre o limón)
Colorantes alimentarios al gusto
Preparación:
Mezcla el crémor tártaro con el azúcar y la albúmina en un bol grande.
Con una batidora eléctrica incorpora el agua y bate a velocidad baja durante 10 minutos, hasta que haga picos fluidos. Si queréis añadir alguna esencia, añádela junto al agua. Antes de finalizar agregar las 6 gotas de ácido acético.
(Si utilizas una amasadora tipo Kitchen Aid, utiliza el batidor plano. Si lo haces a mano, hazlo con movimientos envolventes y con ayuda de una espátula para no introducir aire a la glasa.)
La glasa real se conserva en la nevera 15 días. Se debe guardar en un recipiente de plástico hermético y cubierto con film transparente a piel, para evitar que se seque la capa exterior.
Antes de cada uso es imprescindible dar a la glasa un batido enérgico durante unos minutos para recuperar la textura.
Para realizar el montaje de la Casita de Jengibre la glasa debe tener una consistencia parecida a la de la pasta de dientes (se le llama «pico duro»).
Montaje de la Casita de Jengibre
Para decorar la casita de jengibre puedes utilizar gominolas, nubes, bastones de caramelo, purpurina comestible, grageas de chocolate. Cualquier ingrediente dulce que se te ocurra te puede servir para decorarla.
Colócate todas las paredes de tu casita de jengibre estiradas y en orden para empezar a montar sobre una base. Puede ser una base de tartas forrada con fondant.
Puedes empezar por la pared que más rabia te dé, pero calcula bien para que no te quede ninguna parte de la casita fuera de la base. Pon una buena cantidad de glasa en la pared y pégala a la base haciendo un poco de presión. Para aguantar la pared mientras pegas las demás, coloca un bote de conserva que haga de soporte.
Continúa pegando una de las paredes contiguas a la que acabas de pegar, pero esta vez pon glasa en la base y en el lateral que tocara la pared que ya está pegada.
Coloca, y haz un poco de presión con la otra pared para que la glasa se pegue bien dejando otro bote detrás de la pared que acabas de pegar.
Repite el proceso con las dos paredes que te quedan. Recuerda colocar un bote detrás de cada pared para sujetarlas.
Ahora coloca las galletas que formarán el techo de la casa, una junto a la otra con una separación de 2 cm.Recorta un trozo de folio 15 cm. x 8 cm. y pon un poco de glasa en los extremos. Pégalos a las galletas. Esto da un poco más de estabilidad al techo.
Pon glasa en la parte superior de todas las paredes para pegar el techo. ¡Ahora llega el momento crítico! Con mucho cuidado coloca las dos galletas del techo de manera que repose sobre las cuatro paredes.Haz una leve presión para que la glasa se adhiera a todas las paredes. Añade glasa si es necesario a los posibles huecos que hayan podido quedar, y a la junta de las dos partes del techo.
¡Vamos a por la chimenea¡
Para terminar, coloca las piezas de la chimenea. Con el mismo proceso de las paredes de la casa, coloca las cuatro partes de la chimenea.
Deja secar un mínimo de 12 horas, para que seque la glasa antes de decorarla. Retira los botes y ya tienes tu casita de jengibre lista. Puedes utilizar bolas de chicle, bastoncitos de caramelo, sprinkles de azúcar, purpurina, gominolas…Utiliza un poco de la glasa sobrante para pegar las decoraciones.
Conservación y curiosidades:
La Casita de Jengibre decorada aguanta varias semanas. La tradición en Alemania es prepararla en casa con los niños las semanas previas a las fiestas para empezar a comerla el día de Navidad. Puedes conservarla a temperatura ambiente en un lugar fresco y seco al que no le de la luz del sol.
La primera receta europea consistía en almendra molida, migajas de pan rancio, agua de rosas, azúcar y, por supuesto, jengibre.
El primer hombre de jengibre se le atribuye a la reina Elizabeth I, quien eliminó los calcetines de los dignatarios que la visitaban. Los cocineros de la corte crearon el hombre de jengibre como burla.
En las ferias de del siglo XVI se intercambiaban pan de jengibre como símbolo de amor. En un plano más práctico, se cocía y desmenuzaba pan de jengibre para enmascarar el olor a la carne en descomposición que se vendía.
Desde 1991, en el pueblo de Bergen, Noruega, han construido una ciudad de casas de jengibre cada año antes de Navidad.
En diciembre de 2001, los panaderos de Torun, en Polonia, intentaron batir el Libro Guinnes realizando la casa de jengibre más grande de la historia. Se hizo con más de 4.000 panes de jengibre en forma de ladrillo, 6.000 huevos, una tonelada de harina y 2.200 kilos de mantequilla. Media más 3,50 metros de altura.Como en casa somos unos enamorados de Pesadilla antes de Navidad, la casita de jengibre esta decorada como la ciudad de la Navidad que tanto emociona a Jack!
Espero que te animes a probar la receta y montar tu Casita de Jengibre. Si subes fotos utiliza el hashtag #recetasmericakes para que no me la pierda!!
Feliz navidad!
Casita de Jengibre
Ingredientes
- 250 gr Mantequilla a temperatura ambiente
- 200 gr Azúcar moreno
- 2 huevos Talla L
- 100 gr Melaza o miel
- 3 cda Cucharadas de canela molida
- 3 cda Cucharadas de jengibre molido
- 1/4 cda Cucharadita de clavo molido
- 1/2 cda Cucharadita de pimienta molida (opcional)
- 800 gr Harina
- leche (si es necesaria)
Elaboración paso a paso
- No recomiendo hacer esta receta a mano, es imprescindible la ayuda de una batidora eléctrica.Elaboración GalletaEn un bol bate a velocidad baja la mantequilla troceada hasta que tenga una textura suave. Incorpora el azúcar dejando que se integre bien en la mantequilla. Sube la velocidad y deja unos minutos hasta que tenga una textura esponjosa.Baja la velocidad y añade los huevos ligeramente batidos y también la melaza y las especies. Sigue batiendo un par de minutos más.Cambia las varillas por la pala plana. Con la harina tamizada, ves echando a cucharadas de a poco dejando que se integre. Cuando lleves ¾ de la harina la masa empezará a desmigarse, en este momento añade la leche, una cucharada cada vez, y sigue mezclando hasta que la masa vuelva a ligar.Añade la harina restante hasta que veas que la masa se despega sola de las paredes del bol y se forma una bola.Estira la masa con un rodillo entre hojas de papel vegetal a 6 mm de grosor. Guarda en la nevera durante al menos 6 horas.Corta las galletas con un set de cortadores de Casita de Jengibre(aquí te dejo el enlace por si no tienes el set de cortadores)
Kit cortadores casita de Jengibre y colócalas en una bandeja de hornear con 2 cm de separación. Recuerda poner en cada bandeja galletas del mismo tamaño para que se horneen por igual.Vuelve a guardar en la nevera entre 30 minutos y 1 hora para que no pierdan la forma al hornearse.Con los recortes que sobran, únelos en una bola y estira nuevamente con el mismo procedimiento anterior.Enfría en la nevera un mínimo de 1 hora, estos recortes los puedes utilizar hasta 3 veces. Después la superficie de la galleta queda muy rugosa y no va bien para decorar, pero sigue estando buenisima!Precalienta el horno a 180º e introduce la bandeja de hornear a altura media.El tiempo de cocción varía en función del tamaño de la galleta y del horno que uses, por lo tanto una galleta de 10cm (unos 12 minutos) no se hornea el mismo tiempo que una de 20cm (unos 22 minutos). Lo ideal es que las saques cuando tengan toda la superficie dorada.Cuando las saques del horno, déjalas enfriar 5 minutos y luego las retiras con una espátula con mucho cuidado.Déjalas enfriar encima de una rejilla. En este momento verás que las galletas están un poco blandas, pero al enfriarse se endurecen. - Conservación masa horneadaUna vez frías y si no vas a decorarlas ese día, guárdalas en un taper hermético entre hojas de papel de hornear. Las galletas tienen una duración de 2 meses a partir de su elaboración.Puedes congelarlas en el mismo taper hermético durante 3 meses, cuando vayas a utilizarlas colócalas en una rejilla y deja a temperatura ambiente durante al menos 2 horas antes de decorarlas.Las galletas ya decoradas nunca se congelan.Recomendaciones:Puedes prescindir de la pimienta si vas a preparar las galletas para los más peques de la casa.Utiliza bandejas de horno de metal claro, ya que las negras reparten muy mal el calor y siempre te quedaran algunas galletas quemadas y otras un poco crudas.¡No tires los recortes que te sobren después del tercer estirado! Córtalas con la forma que más te guste. La superficie quedará rugosa, pero están igual de buenas para comer en el desayuno.Esta masa es perfecta para hacer muñecos o formas para colgar en el árbol. Antes de hornearlos, haz un agujerito en la masa con ayuda de una cañita, para que luego puedas pasar una cinta o cordel.
- Glasa realIngredientes:45 g de albúmina950 g azúcar glass (icing sugar)170 g agua1 cucharada de glucosa½ cucharadita de crémor tártaroEsencia transparente6 gotas de ácido acético (vinagre o limón)Colorantes alimentarios al gustoPreparación:Mezcla el crémor tártaro con el azúcar y la albúmina en un bol grande.Con una batidora eléctrica incorpora el agua y bate a velocidad baja durante 10 minutos, hasta que haga picos fluidos. Si queréis añadir alguna esencia, añádela junto al agua. Antes de finalizar agregar las 6 gotas de ácido acético.(Si utilizas una amasadora tipo Kitchen Aid, utiliza el batidor plano. Si lo haces a mano, hazlo con movimientos envolventes y con ayuda de una espátula para no introducir aire a la glasa.)La glasa real se conserva en la nevera 15 días. Se debe guardar en un recipiente de plástico hermético y cubierto con film transparente a piel, para evitar que se seque la capa exterior.Antes de cada uso es imprescindible dar a la glasa un batido enérgico durante unos minutos para recuperar la textura.Para realizar el montaje de la Casita de Jengibre la glasa debe tener una consistencia parecida a la de la pasta de dientes (se le llama «pico duro»).
- Montaje de la Casita de JengibrePara decorar la casita de jengibre puedes utilizar gominolas, nubes, bastones de caramelo, purpurina comestible, grageas de chocolate. Cualquier ingrediente dulce que se te ocurra te puede servir para decorarla.Colócate todas las paredes de tu casita de jengibre estiradas y en orden para empezar a montar sobre una base. Puede ser una base de tartas forrada con fondant.Puedes empezar por la pared que más rabia te dé, pero calcula bien para que no te quede ninguna parte de la casita fuera de la base. Pon una buena cantidad de glasa en la pared y pégala a la base haciendo un poco de presión. Para aguantar la pared mientras pegas las demás, coloca un bote de conserva que haga de soporte.Continúa pegando una de las paredes contiguas a la que acabas de pegar, pero esta vez coloca glasa en la base y en el lateral que tocara la pared que ya está pegada.Coloca, y haz un poco de presión con la otra pared para que la glasa se pegue bien dejando otro bote detrás de la pared que acabas de pegar.Repite el proceso con las dos paredes que te quedan. Recuerda colocar un bote detrás de cada pared para sujetarlas. Ahora coloca las galletas que formarán el techo de la casa, una junto a la otra con una separación de 2 cm.Recorta un trozo de folio 15 cm. x 8 cm. y pon un poco de glasa en los extremos. Pégalos a las galletas. Esto da un poco más de estabilidad al techo.Pon glasa en la parte superior de todas las paredes para pegar el techo. ¡Ahora llega el momento crítico! Con mucho cuidado coloca las dos galletas del techo de manera que repose sobre las cuatro paredes.Haz una leve presión para que la glasa se adhiera a todas las paredes. Añade glasa si es necesario a los posibles huecos que hayan podido quedar, y a la junta de las dos partes del techo.
- ¡Vamos a por la chimenea¡Para terminar, coloca las piezas de la chimenea. Con el mismo proceso de las paredes de la casa, coloca las cuatro partes de la chimenea.Deja secar un mínimo de 12 horas, para que seque la glasa antes de decorarla. Retira los botes y ya tienes tu casita de jengibre lista. Puedes utilizar bolas de chicle, bastoncitos de caramelo, sprinkles de azúcar, purpurina, gominolas…Utiliza un poco de la glasa sobrante para pegar las decoraciones.
- Conservación y curiosidades:La Casita de Jengibre decorada aguanta varias semanas. La tradición en Alemania es prepararla en casa con los niños las semanas previas a las fiestas para empezar a comerla el día de Navidad. Puedes conservarla a temperatura ambiente en un lugar fresco y seco al que no le de la luz del sol.La primera receta europea consistía en almendra molida, migajas de pan rancio, agua de rosas, azúcar y, por supuesto, jengibre.El primer hombre de jengibre se le atribuye a la reina Elizabeth I, quien eliminó los calcetines de los dignatarios que la visitaban. Los cocineros de la corte crearon el hombre de jengibre como burla.En las ferias de del siglo XVI se intercambiaban pan de jengibre como símbolo de amor. En un plano más práctico, se cocía y desmenuzaba pan de jengibre para enmascarar el olor a la carne en descomposición que se vendía.Desde 1991, en el pueblo de Bergen, Noruega, han construido una ciudad de casas de jengibre cada año antes de Navidad.En diciembre de 2001, los panaderos de Torun, en Polonia, intentaron batir el Libro Guinness realizando la casa de jengibre más grande de la historia. Se hizo con más de 4.000 panes de jengibre en forma de ladrillo, 6.000 huevos, una tonelada de harina y 2.200 kilos de mantequilla. Media más 3,50 metros de altura.Como en casa somos unos enamorados de Pesadilla antes de Navidad, la casita de jengibre esta decorada como la ciudad de la Navidad que tanto emociona a Jack!